- •§ 1. Palabra y objeto
- •§ 2. Sinónimos •
- •§ 3. Diferencia sinonímica
- •§ 4. Fuentes de la sinonimia
- •§ 5. Antónimos ,
- •§ 7. Palabras correlativas
- •§ 8. Cambio de significado.
- •§ 9. Metáfora. Grupos principales
- •§ 10. Estructura de las metáforas
- •§ 11. Metonimia
- •§ 12. Elipsis ,
- •§ 13. Efectos del cambio semántico
- •§ 14. Palabra. Estructura morfológica
- •§ 15. Sufijos. Generalidades
- •§ 16. Sufijos apreciativos. Generalidades
- •§ 17. Sufijos productivos
- •§ 18. Principales sufijos der nombre sustantivo y adjetivo
- •§ 19. Derivación nominal
- •§ 20. Derivación verbal. Sustantivos postverbales
- •§ 21. Prefijos.-Generalidades '
- •§ 22. Clasificación de los prefijos
- •§ 23. Grupos de los prefijos
- •§ 24. Estudio de algunos prefijos productivos
- •§ 25. Modelos productivos de la propia composición
- •§ 26. Sustantivación. Generalidades
- •§ 27. Adjetivo sustantivado
- •§ 28. Participio sustantivado
- •§ 29. Infinitivo stistantívado
- •§ 30. Oraciones o partes -
- •§ 32. Adjetivación de los sustantivos
- •§ 33. Adverbialización. Generalidades
- •§ 34. Clases de corfes
- •§ 35. Locución nominal
- •§ 36. Locución adjetival
- •§ 37. Locución verbal
- •§ 38, Locución participial
- •§ 39. Locución pronominal
- •§ 44. Elementos formativos del léxico español antes de la románizactón '
- •§ 46. Germanismos
- •§ 47. Arabismos
- •§ 52. Anglicismos
- •§ 53. Préstamos del ruso (rusismos, sovletismos) - -
- •§ 56. El español que se habla en Hispandamérica
- •§ 57. Arcaísmos '
- •I s8. Neologismos '
- •§ 57. Arcaísmos ’ .
- •§ 60. Lenguaje coloquial ,
- •§ 61. Lenguaje profesional y jerga profesional
- •§ 63. Diatectismos
- •§ 61. Lenguaje profesional y jerga profesional
- •§ 63. Dlalectismos
- •§ 64. Lenguaje afectivo
- •§ 65. Eufemismos
Es
propia de todos los sufijos la función
La
segunda función es a
La
tercera función es expresar las relaciones dekrmina-
das entre
la radical (base de,f.9rmación)'y
el derivado, es
decir algunos sufijos (feiíolari'tas relaciones
activas o pasi-
vas, compárese: mandatario frente a mandante,
temible,
temedero frente a temedor, temerón. '
Los
sufijos Apreciativos no cambian la categoría gramati-
cal del
tema, por ejemplo: bosquecillo (de bosque), vejete
<de viejo),
cerquita (de cerca), deseandito (de deseando).
Se
aplican a todas las partes de la oración.
La
fórmula del sufijo apreciativo es «;^ocaI + consonan-
te>,
se coloca entre la radical y las desinencias: mes-it-a,
hombr-ot-e,
dorm-it-ar.
Cuando
la radical es corta (se compone de un sólo mor*
fema) se le
agregan ciertas sílabas intermedias, debido a<
que los
principales sufijos apreciativos representan la
triple
forma:-it-,-cit-, -ecit-, -ill-,-cill-, -ecill-, -ic-,-cic-,
-ecic-,
etc.
-
Los sufijos apreciativos sirven para modificar la canti-
dad de
sustancia semántica que comprende la radical. En
las frases se
efectúa cierta _especialización dentro.del campo,
aumentativo o
dentro del diminutivo. Teóricamente, un
mismo sufijo puede
afectar a uno u otro campo: sillón —
aumentativo de silla,
islote — diminutivo de isla.
--
Con el fin práctico se suelen dividir los sufijos aprecia-
tivos
en: a) diminutivos (-ic-o, -it-o, -in-o, -ill-o); bar
quitó,
padree ito, madree ita, solee i to, floree
itav-cuaderiiillos
cancionciüa; b) aumentativos (-ot-e, -ez-o,
-ón): ham-
brón,
mujerona, hombrazo, mujeraza; e) despectivos (-ueí-o,,
-ach-o,
-ej-o, -et-e, -ac-o, -ach-o, -aj-o), que desvaió-^
rizan
los objetos: patizuelo, ricacho, libraco, calleja,'
tenducho. . . / - ^
v’
f
4 '"t * i/i/ f
36léxico-gramati-
cal
que sirve para clasificar las palabras derfváaas según
las
partes de la oración, por ejemplo: verde — verdura-
verdear. ’grupar
las palabras_dexixadas
según
sus características semánticas, pof-éjiín^, como
agentes de
la acción, resultado de la acción, sustantivos de
la idea
colectiva, etc.§ 16. Sufijos apreciativos. Generalidades
fit,
U ú-ííí!
En
las frases se nota cierta confusión en la aplicación de estas
categorías de sufijos, a lo que contribuye notablemente la
infinidad de significaciones posibles representadas por todos los
sufijos apreciativos: el diminutivo llama al afecto, a la idea
activa, al laudativo; el aumentativo evoca el valor peyorativo o el
valorativo.
Algunos
derivados con los sufijos -i 11-, -on, -uel-, etc.
La
actividad de los sufijos apreciativos es muy intensa en los países
de Hispanoamérica.
Los
principales valores de los sufijos apreciativos son:
Noción
de empequeñecimiento o aumento de tamaño: Sentada en un banquillo
de tabla a la sombra de los soportales, una vieja de lentes
hace media (Cela). Se trataba de un hombre bajo y gordote, que se
llamaba «El Chinitas» (Pavón). _
Valor
afectivo o despectivor Al tanteo extraje de bajo el lecho un pár
de bolitas raídas (Güiraldes);— ¡No digas palabrotas! grité
yo, porque mi madre nos lo había prohibido (Azpiri); ¡Platero,
Platerillo, Platerete, Pía te- rucho! (Jiménez), ,
Ideí
valorativa: El camino es derecho y no tiene sombra donde guarecerse
de la calorina (Salinas). No hay quien pueda con él, fuertote que
está (Ferlosio). Y este es un cuchillo, un cuchillito que apenas
cabe en la mano (Lorca).
_4^
Valor activo: Hágame-un-favorcito;—Aguarda-un- «gundito —
protestó el alcarreño—. ¿Nos corre alguien? (Ferlosio).
37han
perdido-su
valor apreciativo, adquiriendo un valor -TormJfÍTO. Un
bocadillo un o\}\&ÍQ
distinto de un
bocado pequeño,
es decir se han formado nuevos lexemas como bocadillo,
panecillo, tablón, portezuela, etc., por ejemplo: Hubo café con
leche y bocadillo de queso y anchoas (Mollá). El chaparrón
lesn:egó en un momento, calándoles hasta los huesos, hasta los
goznes de la catapulta de sus brazos (Mollá). Casta mire
cuidadosamente por la mirilla y, después de reconocer a quien
llama, se acerca de puntillas a la puerta del salón y, apenas
audible, exagerando los movimientos de los labios: ¡Es la Angustias
esa! (Vicente).
,
-fT
i.-il
k
.t-i,
EJERCICIOS
PRACTICOS
I.
Sepárense las palabras con los sufijos apreciativos, explicando sus
valores; tradúzcanse al ruso:
1.
Particularmente Facía, que era de suyo sencilloU ly noble, sé
despilfaró. Gastó en gargantillas de todos colores, en
sortijas, espejucos y alfilerones de todás hechuraí un dineral:
todo lo ahorrado de sus soldadas (Pereda).
Chisco
llevaba una escopetona de pistón cori anchas ab*
I
razaderas reforzadas con bramante encerado sobre el larguísimo
cañón roñoso, un cuerno para la pólvora y una bol* sa de badana
verde para el perdigón y las postas que Iban mezcladas con él
(Pereda). 3. Los criados repartían champaña, pastelitos,
almendras saladas, bombones, cigarlllos j
(Asturias).
4. Chiquito y estrecho de hombros,jcon el traje raído, parecía
meditar en la suerte general del ¡mundo (Sá* bato). 5. Luego
entramos por otras callejas menos empinadas (Azpiri). 6.
Así le dieron un puestillo a la tía Teresa en el Ministerio de
Hacienda; aunque, como decía Fernando, le debían haber dado un
cargo en el Ministerio de Salud Pública (Sábato). 7. Cuando salí
del hotelucho el reloj marcaba las once (Travieso). 8.
Están en la piececita de prueba con Wanda (Sábato). 9. Era una
mezcla de conventillo y cabellerizas: se oían gritos,
conversaciones y varias radios simultáneas, en medio de un fuerte
olor de estiercol (Sá- bató). 10. Cara.de
Angel sacó
la cabeza por ,1a portezuela para gritar al cochero que tuviera más
cuidado"(Asturias);
Otro
imponente, oye, ¡que cochazo! (Gaite).. 12. Martín está sentado
en el patizuelo de su casa; Martín es un lambri- go (Azorín). 13.
El carro camina por un canriñejo hondo - -y pedregoso; hemos
dejado atrás e llanon desfilamos bordeando terrenos;
descendiendo a hondonadas, subiendo de nuevo a oteras y lomazos
(Azorín). 14. En la vitrina pueden verse baratijas de todo tipo,
peines, redecillas, zarcillos y colgajos (Salinas). 15. Ordena a
Casta que le sirva una tacita de chocolate con picatostes
(Vicente)- 16.- Metí lai ca
38
beza
debajo
del chorro y-luego me-sequé con-el-pañuelo| (Umbral)^ 17. Berto y
yo masticamos nuestros bocadillos^ en silencio (Umbral). 18. Las
colinitas rojas, más pobresj cada día por la cava de los
areneros, que vistas desde elf mar, parecen de oro y que nombraron
los romanos de esej modo brillante y alto (Jiménez). 19. Sí, es
León, vestido ya, y perfumado para la música de anochecer, con su
saquete a |
:a
)-
is
).
3-
r-
1-
in
a-
os
je
á-
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en
io,
ud
jr-
ba
'
y
ios
5á-
íla
s).
tín
ri-
ido:
or-
de
len
los
ina
la
cuadros,
sus botas de hilo blanco y charol negro, su descolgado pañuelo
de seda verde y, bajo el brazo, los relucientes gatillos (Jiménez).
20. ¿Cuándo será la mejor hora para lablar al señor don José de
un... de un asuntillo?— ¿De un asuntillo? Ahora mismo (Gaidós).
21. Una casona enlucida con un portalón y dos rejas que
ocupaba to da la plaza (Aub). 22. El Comité lo formaban cinco
hombres a quienes el Cojo conocía vagamente; tres de ellos estaban
en camiseta, los otros en mangas de camisa (Aub). 23. El Cojo cogió
un palillo que se le había caído de la cintura al suelo, le
levantó
y di jo.Acepto
(Aub).
'
vjj..
Sepárense las palabras con los sufijos apreciativos explican do su
estructura; tradúzcanse al ruso;
1.
La períÚM^aldera latía y vociferaba también a su- modo, y
zarandeaba el cordel que la sujetaba a la mana^ de Pito; pero
temblaba mucho... aunque no tanto como yo (Pere^). 2. Dos oscuras
embarcaciones, cada, una con.su lucecjíy, se acercaban a nuestro
encuentro (Umbral). 3. Me arranqué la ropa y salté al agua en
calzon<ffl^iíUmbral).
Una
iglesia donde media docena de muierinas)rezan.
14.
No sé a qué podría, jugar con nosotros una chavaí^^tetiN pequeña
(Azpiri). 15. Para este plan de tarde... Deseanííte' es lo que
estoy, date cuenta (p!edosio). 16. Aniano se aflojó la corba
ta; traía un traje<m^cIaro rozado en las boca-
39
en
voz alta (Salinas). 5. El ventero despacha tres polvotpneQ
a un niño tan chico que casi no alcanza a poner sus monedas en el
tablero del mostrador (Salinas). §,No pudo distinguir bien el
rostcp.de Gonzales Bernal.jiero en la oscuridad sintió esos
^i^É^urloneSjyese aireq^Q)de sabelotodojle estos _ Ucenciadetes^ue
nunca pelean, que nada máslíáblaban mucho mientras ellos ganaban
batallas (Fuentes). 7. Toi las riendas y ella se sentó a su lado y
abrió-la-sombi?' azul, sin dirigir la mirada a su esposo
(Fuentes). 8.
Sac^_ cajeti^de la bolsa jieLsaQg^(Fuentes). 9- Vuelvo ahoiltat
Tengo que salir un momerxfí^sabe usted (Llosa). 10. Esf palabras
las dijo casi en la calle;.Ijifige-^erró la puerta poco a poco,
frotóse las manos gordeíuelas^ se volvió después de un instante
de indecisión (AsíílrraSt. 11. A pesar de su estatura
y de
su cuerpecillo
canijo, tira ya catorce am^y_ fia de ganarse la vida (Medíor.
12.Xomió
ún tjo^de tortilla y un pane<^115. (Medio). 13. Una
musí4uíllp triste, monótona, le enwlvía a medida que andaba
(Murpiano).
manga^y
un lapicero amarillo con capucha le asomaba en el bolsíllb
superior; la piel del cuello le sudaba y se pasó los decbs
(Ferlosio). 17-^n todas partes había cola, para todo hacía falta
la cgjctfllá (Rubio), 18. El gato observaba a todos con los oji^M
legañosos abiertos de par en par (Candel). 19. DuponVle llevaba y
traía cart^s^ recados al alemán, y^stp le proporcionaba un
dineíille (Umbral).
Un
perílj^e rastrear conejos pása por la cung^ (Cela).
Del
patio se pasa al jardín por una puertep^ilj^ (Cela). 22^^^ué le
pasa a Nicolás? Parece como si tuviese hormi- gunl^Soto). 23.
Quería aparentar calma y serenidad, pero no acababa de
conseguirlo; se le notaba nervioá^ y como azorado (Cela). 24¿^^1
viento, creo. El viento y los graznidos de pajaiTácor
(Rubio). 25. Solamente acarició su histriónica barbita (Candel)i
26. Se llamaba Ramón y era un tipejo coj^cast contrahecho, que me
miraba siempre con unos oji1bs>urlones (Rubio). 27. Había un
ventanuco, con una mancha de humo encima, sobre lo blanco 'del
lucido (Ferlosio). 28.— Y uno, dando el callo... [ Treinta y dos
meses dando el callo! — Y no \«as como vive el te- nientaj^
ese... (Lera).
(líh
Sepárense en las frases las palabras con los sufijo»' despectivos,
tradúzcanse al ruso:
1.
Y sobrei la empapada lana del asnuchdt las campa-¡ nillas mojadas
gotean todavía (Jiménez) 2. De cuando €% Mando, vuelve Ta
cabeza
y arranca las flores, a que su bocb- Icanza (Jiméqez). 3. Pronto se
vio rodeado nada más de popuÉcl^madrugador (Clarín). 4. Las
campanillas, niveas y''gt^das, le cuelgan, un momento, entre el
blanco babear verdoso y luego se le van a la barrigota cinchada
(Jiménez). 5. Ya recuerdas los
■i
tenduchos
astraso&jdg
,i los gitanos, con sus hogueras,
sus mujeres vistosas, y sus
(Jira^z). 6. No le queda muela ni diente, y casi sólo come
mig^qó^e-paiMlue-ablanda primero en la mana(J Lménez).^.
•;i en el cerro con su tía, la señora Engracia, herma-
j-: nastrajde su.difunto padre, por haberse quedado huérfana
de ambas partes aún muy tierna, y como era de natural con' sentidora y algo tímida, jamás nadie pudiera decir que con
nadie la hubieran visto y oído discutir, y mucho menos con ; . su tía, a Jfrvque tenía un gran respeto (Cela). 8. Tenía
un ventamco y una puerta cubierta con una cortina de saco
J 40